La Concesión Internacional de 上海 Shanghái
Obreros y estudiantes en el Shànghǎi de los años veinte
En la década de 1920, 上海 Shànghǎi era una metrópoli marcada por el contraste: un centro financiero y cosmopolita bajo control extranjero, y al mismo tiempo una ciudad obrera donde miles de chinos trabajaban en condiciones miserables en fábricas textiles, muchas de ellas de capital extranjero. La República de China, fundada en 1912, estaba debilitada por luchas internas: caudillos militares, divisiones dentro del 国民党 Kuomintang y la reciente fundación del Partido Comunista en 1921, que apenas comenzaba a organizarse. En este escenario de inestabilidad, los obreros y estudiantes se convirtieron en actores sociales con un papel cada vez más protagónico.
El 30 de mayo de 1925
El conflicto que desembocó en el Movimiento del Treinta de Mayo tuvo como detonante la muerte de 顾正红 Gù Zhènghóng, joven obrero de apenas veinte años que trabajaba en la fábrica textil japonesa número 8 de Shànghǎi. Gù no era un trabajador anónimo: militante del recién fundado Partido Comunista de China, se había destacado como representante obrero en la defensa de mejores condiciones laborales. El 15 de mayo de 1925, durante una protesta en la fábrica, fue atacado por un capataz japonés y recibió varios disparos: herido en la pierna, continuó alentando a sus compañeros hasta que finalmente fue abatido con tiros en el abdomen y la cabeza. Su muerte, ocurrida en plena juventud y bajo circunstancias de brutal violencia, encendió la indignación popular. El sacrificio de Gù se convirtió en símbolo de la resistencia obrera contra el imperialismo extranjero y su figura sigue siendo recordada en la ciudad, donde un memorial preserva su legado, y en toda China, como símbolo de heroísmo juvenil.
La repercusión nacional
El eco de los disparos de Shànghǎi se propagó por toda China. En Cantón, Běijīng, Wǔhàn y Hong Kong se multiplicaron las huelgas, marchas y boicots a productos extranjeros. Por primera vez desde el Movimiento del 4 de Mayo de 1919, estudiantes y obreros se unieron en una protesta común, y el episodio se convirtió en símbolo de resistencia contra la opresión colonial. Para muchos historiadores, el Movimiento del Treinta de Mayo fue un momento de inflexión: mostró que las fuerzas sociales urbanas podían desafiar al poder extranjero y sentó las bases de una conciencia nacional más radicalizada. Según Jonathan Spence (1999), el eco del movimiento se extendió más allá de Shànghǎi y reveló la fragilidad del control extranjero frente a una creciente conciencia nacionalista.
Memoria y legado
El relieve en el Monumento a los Héroes del Pueblo en Běijīng y el monumento en la Plaza del Pueblo de Shànghǎi mantienen viva la memoria de aquel día. No se trata solo de homenajes escultóricos: son recordatorios de que la independencia de China se forjó en episodios de sacrificio colectivo. Lucien Bianco (1975) recuerda que el Treinta de Mayo debe entenderse como parte de la cadena de luchas que alimentaron la revolución de 1949, aun cuando en su momento no lograra cambios inmediatos.
Bianco, L. (1975). Orígenes de la revolución china, 1915–1949. México: Siglo XXI.
Dirlik, A. (1978). Revolution and history: The origins of Marxist historiography in China, 1919–1937. Berkeley: University of California Press.
Fairbank, J. K., & Goldman, M. (2006). China: A new history. Cambridge: Harvard University Press.
Fenby, J. (2008). The Penguin history of modern China. Londres: Penguin.
Spence, J. D. (1999). En busca de la China moderna. Barcelona: Crítica.
Wasserstrom, J. N. (1991). Student protests in twentieth-century China: The view from Shanghai. Stanford: Stanford University Press.
Díaz, M. E. y Torres, L. N. (21 de septiembre de 2025). El Movimiento del Treinta de Mayo. China desde el Sur. https://www.chinadesdeelsur.com/2025/09/el-movimiento-del-treinta-de-mayo.html
南








