" El mercader afortunado y el secreto del caparazón de tortuga

El mercader afortunado y el secreto del caparazón de tortuga

0

En la cosmovisión de la literatura vernácula de la dinastía 明 Míng, la línea que separa el esfuerzo humano del decreto celestial es a menudo difusa. ¿Es la riqueza fruto del trabajo duro o un regalo caprichoso del destino? 凌濛初 Líng Méngchū (dinastía 明 Míng, 1580-1644), en su célebre colección 《拍案惊奇》 Pāi àn jīng qí, Golpear la mesa por la sorpresa, explora este interrogante a través de la historia de 文若虚 Wén Ruòxū. En "El hombre cuya suerte ha cambiado se encuentra con mandarinas de Dòngtíng", no asistimos a la epopeya de un héroe que conquista la fortuna, sino a la crónica de un hombre común que  encuentra oportunidades inesperadas y, lejos de marearse con ellas, sabe aprovecharlas en su beneficio y el de sus amigos.

Dado que se trata de una historia extensa, ofreceremos solamente una síntesis y la traducción de algunos pasajes clave que permitan disfrutar de ella.

转运汉巧遇洞庭红 波斯胡指破鼍龙壳

Zhuǎn yùn hàn qiǎo yù dòng tíng hóng bō sī hú zhǐ pò tuó lóng ké

El hombre cuya suerte ha cambiado se encuentra con mandarinas de Dòngtíng. El mercader de Persia revela los secretos de un caparazón de tortuga

Introducción sobre la fuerza del destino 

La narración se abre con un poema que establece el tono fatalista de la obra, sugiriendo que la ambición humana y la planificación son a menudo inútiles frente al destino:

日日深杯酒满

Rì rì shēn bēi jiǔ mǎn

Cada día lleno hasta que rebose la copa de vino,

朝朝小圃花开

Zhāo zhāo xiǎo pǔ huā kāi


Cada mañana se abren las flores en el pequeño jardín.

自歌自舞自开怀

Zì gē zì wǔ zì kāi huái


Canto y bailo solo, disfrutando de mi propio júbilo,

且喜无拘无碍

Qiě xǐ wú jū wú ài


Y me alegra estar libre de ataduras y obstáculos.

青史几番春梦

Qīng shǐ jǐ fān chūn mèng


La historia registrada es solo un sueño de primavera tras otro,

红尘多少奇才

Hóng chén duō shǎo qí cái


En este mundo mortal, cuántos talentos extraordinarios hay.

不须计较与安排

Bù xū jì jiào yǔ ān pái


No hay necesidad de calcular ni planificar,

领取而今见在

Lǐng qǔ ér jīn jiàn zài


Acepta y disfruta el presente que tienes ahora.

Para ilustrar esto, el narrador introduce una reflexión tajante sobre la naturaleza de la fortuna:

俗语有两句道得好:“命若穷,掘得黄金化作铜。命若富,拾着白纸变成布。”

Sú yǔ yǒu liǎng jù dào dé hǎo: “Mìng ruò qióng, jué dé huáng jīn huà zuò tóng. Mìng ruò fù, shí zhe bái zhǐ biàn chéng bù.”

Hay un refrán popular que lo expresa muy bien: "Si tu destino es la pobreza, aunque excaves oro, se convertirá en cobre. Si tu destino es ser rico, aunque recojas papel blanco, se transformará en tela." 

Se presenta, entonces, la anécdota de 金维厚 Jīn Wéihòu, un hombre de la dinastía 宋 Sòng que dedicó su vida a acumular plata. Una noche, soñó con unos espíritus que le advertían que esa riqueza no le pertenecía. Al despertar, sus ahorros habían desaparecido y aparecieron milagrosamente en casa de la familia 王 Wáng. 金 Jīn comprendió así que el esfuerzo sin destino es vano .

"El Desafortunado"

La historia principal sigue a 文若虚 Wén Ruòxū, un hombre culto de 苏州 Sū Zhōu que fracasa en todo negocio, ganándose el apodo de 倒运汉 dǎo yùn hàn, "un tipo desafortunado". Arruinado, se une a un grupo de mercaderes liderados por 张乘运 Zhāng Chéngyùn en un viaje por mar. Sin capital, invierte una pequeña suma donada por sus amigos en mandarinas rojas de 洞庭 Dòngtíng, una fruta común, provocando la risa de sus compañeros.

El giro del destino 

El barco llega al reino de 吉零 Jílíng. Allí, 文 Wén descubre que sus mandarinas son consideradas un tesoro exótico. Un noble local compra todo el lote pagando con monedas de plata que, aunque tienen grabados de "plantas acuáticas" (indicador de bajo valor local), resultan ser plata pura de gran peso. 文 Wén obtiene así una fortuna inesperada .

En el viaje de regreso, una tormenta los obliga a parar en una isla desierta. 文 Wén encuentra un enorme caparazón de tortuga vacío y decide llevárselo, a pesar de las burlas. Al llegar a 福建 Fújiàn, acuden a un rico mercader persa llamado 玛宝哈 Mǎ Bǎohā. Este queda atónito ante el caparazón y revela que pertenece a un "dragón tambor", que contiene perlas luminosas invaluables en sus costillas. Compra el caparazón por la astronómica suma de 50.000 piezas de plata.

 

玛宝哈 Mǎ Bǎohā le entrega a 文 Wén una tienda de telas y propiedades para evitar que viaje con tanto efectivo. Cuando sus amigos le sugieren que use su nueva riqueza para buscar más ganancias, 文 Wén se niega, demostrando que ha aprendido la lección sobre el destino:

看我一个倒运汉,做著便折本的,造化倒来,平空地有此一主财爻。

Kàn wǒ yī gè dào yùn hàn, zuò zhe biàn zhé běn de, zào huà dào lái, píng kōng dì yǒu cǐ yī zhǔ cái yáo. 

Mírame a mí, un tipo de mala suerte, que en cuanto negocio, pierdo capital. De repente, la fortuna vino, y de la nada surgió esta oportunidad de riqueza. 

司见人生分定,不必强求。我们若非这主人识货,也只当得废物罢了。

Sī jiàn rén shēng fèn dìng, bù bì qiǎng qiú. Wǒ men ruò fēi zhè zhǔ rén shí huò, yě zhǐ dāng dé fèi wù bà le.  

He comprendido que la vida tiene su destino asignado, no hay que forzar lo que no es. Si no fuera porque este dueño reconoció su valor, solo lo habríamos considerado desecho.  

还亏他指点晓得,如何还好昧心争论? 

Hái kuī tā zhǐ diǎn xiǎo de, rú hé hái hǎo mèi xīn zhēng lùn?

Además, gracias a sus indicaciones nos enteramos del valor, ¿cómo podríamos aún, con mala conciencia, disputarlo?

文 Wén reparte las ganancias de las mandarinas entre sus amigos y vive prósperamente. La historia concluye con un poema que reitera la futilidad de luchar contra la suerte:

运退黄金失色,时来顽铁生辉。

Yùn tuì huáng jīn shī sè, Shí lái wán tiě shēng huī. 

Cuando la fortuna se retira, hasta el oro pierde su color; cuando llega el momento, incluso el hierro inerte resplandece.  

莫与痴人说梦,思量海外寻龟。 

Mò yǔ chī rén shuō mèng, Sī liáng hǎi wài xún guī. 

No cuentes sueños a los ilusos, pues pensarán en ir a buscar tortugas a ultramar.

El relato cierra con una nota profundamente reconfortante frente a la incertidumbre de la vida. La historia de 文若虚 Wén Ruò xū nos recuerda la antigua sabiduría china sobre la aceptación de los tiempos propios: hay un alivio en comprender que no todo el peso del éxito recae sobre nuestros hombros. El poema final nos deja la advertencia definitiva y más cortante de 凌濛初 Líng Méng chū: la verdadera necedad no es fracasar, sino tratar de imitar ciegamente la suerte ajena (ir a "海外寻龟 hǎi wài xún guī", buscar tortugas a ultramar, porque a otro le funcionó). La lección perdurable es que cada uno debe estar preparado, sin ansiedades, para el momento en que su propio hierro decida, finalmente, resplandecer.

Díaz, M. E. y Torres, L. (13 de diciembre de 2025). El mercader afortunado y el secreto del caparazón de tortuga. China desde el Surhttps://www.chinadesdeelsur.com/2025/12/el-mercader-afortunado-y-el-secreto-del.html


 

 

 

 




Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios